Buscar este blog

domingo, 31 de marzo de 2019

El asombro

El asombro
Maestra Cuquita Sandoval Olivas

Una hoja en blanco frente a los ojos, miles de ideas revoloteando por la cabeza; pensamientos, emociones, sentimientos y recuerdos que buscan la sinapsis para convertirse en letra viva, en texto que pueda captar el interés del lector y logre convertirlo   no sólo en receptor pasivo del emisario, sino que pueda volar, imaginar, crear, sentir y vivir el mensaje trasmitido. Esas son algunas de las sensaciones vividas cuando se busca un tema específico para desarrollar, un punto de inicio que permita ahondar, investigar y sumergirse para que  luego cumpla su cometido  formando los eslabones correspondientes.
La cotidianidad presenta un amplio abanico de oportunidades, todas las aristas tienen  sus propios recovecos que deben ser reinterpretados bajo la lupa del observador.
Este escrito centra su atención en el asombro; atributo que puede causar efecto negativo o positivo en las personas, pero que permite ser la base del cuestionamiento y de la germinación de acciones.  Decían los filósofos que todo inicia con  la capacidad de asombro, que es una experiencia de iluminación que permite crear una ruta de acceso a la realidad plena;   Aristóteles decía, “que es el paso crucial en el camino del pensamiento” chispa y combustible para mantenerlo vivo;  semilla  del conocimiento,   toma de conciencia de la necesidad de conocer, de investigar, primer paso hacia la reflexión y la contemplación, motivo por el cual se le atribuye ser la génesis de la filosofía, conocida como  la madre de todas las ciencias.
 La palabra “Contemplar” significa “templar el alma”, y templar, proviene del latín de “templo”, los cuales   generalmente eran construidos en la antigüedad en las partes más altas de las montañas, para poder contemplar con una visión panorámica.
Este término también ha sido utilizado por los herreros al templar el hierro y darle forma, así como en nuestra vida personal, cuando adquirimos la templanza ante las adversidades que van forjando nuestro carácter y temperamento.
Cuando detenemos nuestro paso y contemplamos con intensidad, el asombro es inherente; por ejemplo: la belleza del amanecer, de una puesta de sol, el arcoíris, la lluvia, las flores silvestres, la nobleza y lealtad de un perro, la transformación de la oruga, el camuflaje de algunos animales, cuando una flor abre sus pétalos, los colores de la naturaleza, la inmensidad del firmamento, las 12 notas musicales y sus múltiples composiciones en distintos géneros;  las 27 letras y sus cinco  dígrafos (unión de dos letras para representar un sonido) que conforman el alfabeto del español, que al combinarse pueden formar infinidad de palabras, tal es el caso de la obra de Don Quijote, escrita por Miguel de Cervantes Saavedra y publicada  en 1615  que utilizó más de 23,000 palabras distintas; los diversos géneros literarios, la historia y evolución de la humanidad y tantos temas que sería imposible nombrarlos en este apartado.
Ordoñez (2013) asevera:  “ Asombrarse significa salir de las sombras para empezar a captar los bordes de nuestro ser, los límites de nuestro saber…introducir un poco de luz y armonía en la confusión que apenas empieza…notar la magnitud insondable de lo que falta por aprender, por explorar”.
No todo el asombro es genuinamente positivo, nos asombramos del encarecimiento y empobrecimiento; de la corrupción, de los malos políticos, de las guerras, hambrunas, narcotráfico, podredumbre, malas políticas educativas,  los niños y adultos mayores desamparados, migración, discriminación, contaminación, entre otros; así como nos asombran los cambios acelerados que estamos viviendo en la sociedad, la  globalización, los avances en la tecnología y medicina.
No perdamos nuestra capacidad de asombro, reaprendamos   de los niños, quienes siguen  maravillándose de cada cosa que van descubriendo y aprendiendo.  El asombro atañe a la formación de personas y ciudadanos libres.
Hagamos de nuestro  entorno un   mundo mejor.



Sueño americano

El sueño americano
Maestra Cuquita Sandoval Olivas
Hace unos días tuvimos la fortuna de viajar a la unión americana, fue un viaje especial para visitar  familia y amigos, todo fue planeado con antelación, se organizó  cuidadosamente una agenda, buscando sobre todo,  el extender el número de personas a visitar y el   no lastimar susceptibilidades;  se compraron unos pequeños obsequios, característicos de la región como:  dulces de la gota de miel, pinole de los siete granos, cajeta, leche quemada, fruta envasada, carne seca, nueces, panecitos, granola casera, entre otros, con el firme objetivo de afianzar lazos de cariño y afecto que han sido lastimados por la distancia. Con beneplácito observamos, como fue acogida nuestra presencia y el impacto que tiene  un pequeño presente ícono de la localidad, al convertirse en   un puente del recuerdo.  
Lo poquito que llevamos no tiene comparación con lo que  trajimos; cargamos nuestras arcas de sueños, recuerdos  e ilusiones, llenamos los espacios huecos con largas charlas del ayer; no pocas veces los ojos se humedecían con las nostalgias y añoranzas del pasado y otras tantas, sonoras carcajadas inundaban los lugares, con las anécdotas y remembranzas de gente conocida y apreciada de nuestro terruño.
Pude constatar,  que a pesar de  tener mayor fluidez económica que les permite vivir con más comodidades, el precio que se paga es el distanciamiento de la tierra que les vio nacer,  de la familia y  su gente.
La cuestión migratoria es un peso que cae en cada uno de ellos, son barrotes de prisión imaginarios que no les permite el libre tránsito fuera de la nación aún y cuando haya que  dar el último adiós a un ser querido;  y cuando al paso de muchos años, logran obtener su estancia legal y pueden visitar su país, el tiempo se ha encargado de cambiar los escenarios y personajes  que persisten en su memoria, aunado al nulo o poco interés de  sus hijos por conocer la tierra de sus progenitores.
 Juran patria y sometimiento  a las leyes y reglamentaciones de un lugar  que les   brindó cobijo y oportunidad de trabajo, así como  una solidez económica a consta de separación y distancia.
Al llegar al hogar de cada uno de ellos, fuimos recibidos con amor, ilusión y entusiasmo de conocer de viva voz las primicias del pueblo; aún y cuando las redes sociales han permitido que haya mayor interacción, afluencia de novedades, conocimiento y diálogo, el volver a vivir los recuerdos, reconstruir el pasado y nombrar a quienes ya partieron de este mundo,  fue una constante que se repitió incesantemente.
Indudablemente Estados Unidos tiene bellos lugares y paisajes  pero lo más importante,  es la gente tan extraordinaria que lo habita. Cada estado, condado,  pueblo y rancherías tiene  espacios multiculturales, donde trasciende y palpita el corazón de cada ser. Cada persona es una representación de su patria, de su tierra, de su gente,  con su lengua, usos y costumbres que trabaja incesantemente para un país capitalista, buscando el   brindar una mejor calidad de vida a su descendencia.



Renuncio

¡Renuncio!
Maestra Cuquita Sandoval Olivas
Esta palabra previene del latín “Renuntiare” y significa desistir, abandonar.
Con este preámbulo aclaratorio inician  las presentes renuncias personales.
Renuncio:
 A sentirme  menos importante, hábil y capacitada, por el hecho de ser mujer.
 A la ignorancia; aunque reconozco que siempre seré neófita en múltiples saberes y conocimientos;  la lectura, investigación y discernimiento serán compañeros de vida.
 A la intolerancia; reconociendo que somos parte de esta aldea global y las diferencias son la unicidad fundamental  que nos caracteriza.
A la mediocridad; buscando la utopía y los sueños que se esconden tras el horizonte.
A la envidia y maldad; hurgando en los más profundo de mis ser, para rescatar los atributos de la bondad y  nobleza de sentimientos.
Al silencio; a quedarme callada ante los atropellos, injusticias, violencia y malos tratos  que sufre   la población más vulnerable.
A la pereza intelectual y física, que estanca en el conformismo.
A la pobreza espiritual;  vacío que sólo la fe puede llenar.
A lo superfluo; el no  sumergirme en el núcleo de las personas y  cosas,   y  quedarme sedienta y hambrienta   de la esencia primordial que emana de cada una de ellas.
A la irresponsabilidad de no cuidar mi planeta; de dañar con mis acciones el único hogar que poseemos.
Al desamor, al desánimo, a la desventura; comprometiéndome a llenar mis instantes de amor y de ternura.
A la  ociosidad;  a malgastar el tiempo y la energía; y el no disfrutar cada instante de vida.
A descuidar mi salud,  cuidar mi cuerpo  y pensamientos es fundamental para irradiar energía.
A  callar, el no expresar mis emociones y sentimientos no me hace más débil, sino más vulnerable.
A no abrazar  y  no decirle a las personas que las quiero.
A la codicia, disfrutando y compartiendo mis pertenencias,  sabiendo que nada de lo material podré llevármelo al entregar cuentas al creador.
A vivir apresurada, es necesario  aprender a danzar lentamente.
Al ruido y bullicio constante, es preciso saborear momentos de soledad y meditación para reencontrarme a mí misma. 
A  cargar problemas ajenos; cada quien es arquitecto de su propio destino.
A la indiferencia, ante el dolor ajeno.
Al estrés,  tensiones e incertidumbres; debo aprender a relajarme para tomar decisiones más acertadas.
A querer tener siempre la razón; ya que la percepción es relativa al punto de vista y experiencia personal
A querer controlar todo lo que gira a mí alrededor; aceptando lo que puedo cambiar y  tener la capacidad de reconocer la diferencia.
Al odio, la ira y la venganza, que ensombrecen el color de la vida y llenan el alma de resentimiento.
A los pensamientos negativos; buscando el arcoíris en medio de la lluvia.
Al apego emocional de los bienes materiales y aprender a soltar y dejar ir a las personas que amamos.
A la procrastinación, recordando que no se debe dejar para mañana lo que podamos hacer hoy.
A los prejuicios, darme la oportunidad de conocer a las personas antes de emitir juicios.
A  buscar culpables, para tratar de justificarme.

Como seres perfectibles siempre podremos estar en constante renovación de nuestro ser y actuar. Y tú, ¿a qué renuncias?





Carta a Annia

Hgo del Parral, Chihuahua, 19 de septiembre del 2018
Maestra Cuquita Sandoval Olivas
Querida Annia:
Sé que sólo tienes seis meses de vida, pero conozco la magia de la escritura, ésta,  tiene la capacidad de  capturar los instantes, emociones y sentimientos, mismos que espero y aprisiones cuando llegue el momento de que leas y comprendas estas líneas.
Eres la décima y más pequeña de mis nietas, hija primogénita de mi quinto y último retoño; aún y cuando me considero joven a mis 55 años, el tiempo y las experiencias vividas me han enseñado lecciones invaluables que quiero compartir contigo. Primeramente, quiero que sepas que el amor que te profeso fue el detonante de una idea que traía germinando dentro de mí, porque hoy tengo la certeza de estar aquí y poder expresarte lo importante que eres en nuestra vida
Fuiste concebida y esperada con amor por tus padres y todos los que formamos el entorno familiar; desde el momento de tu gestación, has sido acunada con palabras y frases tiernas que demuestran el potencial de cariño que te rodea. Toda tú eres la imagen y semejanza de la perfección divina del creador, tus ojos verdes brillan con la chispa de la inocencia y el candor de la infancia tierna. En tus pupilas se refleja la confianza que profesas. La sonrisa que dibujan tus labios es una invitación a tomarte entre los brazos y cubrirte de besos. Tu hermosa y redonda cabecita, con pelo escaso, es adornada con grandes moños que semejan  un regalo para quien posa la vista sobre ti.
Algo que me asombra gratamente es la capacidad que tienes de aprendizaje; cada día hay un reto superado y una meta alcanzada; desde tolerar el alimento, tu gusto por algunas papillas, el sostenerte en tus piernitas, marcar los primeros pasos y un sinfín de logros que van reafirmando tu excelente salud y bienestar.
Deseo de todo corazón que el ser omnipotente me conceda vida y salud para ser parte de tu desarrollo, y poder enseñarte con mi cariño tierno de abuela a amar a todos tus semejantes, a gozar cada instante de vida, a respetar y cuidar la naturaleza, llevarte de la mano por el mágico sendero de la espiritualidad, que mi cariño sea un estandarte;  que encuentres en mí alguien que te comprenda, escuche y apoye; que te lleve a la fábrica de ilusiones y te acompañe a tejer sueños y que pueda confeccionarte una coraza para que te cubra de las tempestades y te haga resiliente ante las adversidades.
Espero que en la medida que vayas creciendo y tomando conciencia de las cosas, aprendas a conocer y venerar  a tus antepasados y el mundo en que nos tocó nacer, crecer y vivir; tú eres el producto de la unión de tu padre y tu madre, ellos de tus abuelos, nosotros de tus bisabuelos y así sucesivamente; esa carga genética de ambos lados, es la responsable de tu apariencia física y de muchos rasgos de tu carácter y personalidad.
Como seres mortales que somos, es seguro que experimentarás el dolor y duelo por personas queridas que se alejarán de tu lado al emprender el último vuelo, aunque es una de las afrentas más dolorosas que debemos encarar, recuerda siempre que no estarás sola jamás; el espíritu perdura en la fragancia del viento y del recuerdo.
Siempre ayuda a tus semejantes, vístete con los valores universales para que tu presencia sea un deleite  para todas las personas cercanas a tu entorno; respeta y ama la naturaleza; deléitate con los amaneceres y las puestas de sol, con  la fragancia de las cuatro estaciones; enamórate de la luna, de la magnificencia del universo y sé feliz, ¡inmensamente feliz!.
Cariñosamente,

Tu abuela

Cachibol

CACHIBOL
Maestra Cuquita Sandoval Olivas
La historia de la humanidad  se construye con hechos y se reconstruye con palabras, éstas son las herramientas o  vehículos que ayudan a la organización e integración de nuestras redes neuronales, permitiendo con esto al cerebro encontrar significado.
Quien  dedica   tiempo y esfuerzo al arte de escribir, va tejiendo historias con conflictos, resoluciones, argumentos, personajes, escenarios, etc., que permiten la comunicación, recreación  e  interacción con el mundo circundante. 
Un escrito debe encontrar cobijo  primeramente en la atención del lector, para luego lanzar la red con   palabras, frases y oraciones que atrapen, enganchen y cumplan su cometido de trasmitir un mensaje.
Al inicio de  cualquier texto,  es muy importante delimitar el tema de éste y responderse a las preguntas del qué, para qué se va a tratar o abordar, para quién va dirigido; ideas preliminares que serán la base fundamental del cuerpo del texto.
Esta semana enfocaré la atención en escribir un poco sobre  el deporte del cachibol,  mismo que para  orgullo y beneplácito nacional,  se inicia en nuestro país, teniendo tal aceptación que otros países ya lo han adoptado.
Es practicado en México  desde 1971 y  se le atribuye  su iniciación al Profesor Rubén Gil Alarcón, quien al trabajar con adultos mayores, precisó  la urgente  necesidad de  tener un deporte adecuado que propiciara  la ejercitación constante y el cuidado de la salud física y emocional de las personas con más de cinco décadas; aunado a los beneficios  que brinda  la convivencia, competencia e interacción constante  con sus iguales.
Este juego se rige por la reglamentación oficial del voleibol, y está reconocido por la federación Nacional  e Internacional  del deporte.
Las principales instituciones relacionadas con los adultos mayores y el cuidado de la salud, como el IMSS, ISSSTE, DIF e INAPAM lanzan convocatorias a torneos oficiales, mismos que han tenido una gran aceptación, porque brindan la oportunidad de competir, divertirse, viajar y conocer distintas partes de la república mexicana.   
Los equipos pioneros  representativos de la ciudad de Hidalgo del Parral Chihuahua,  están conformados por  los maestros jubilados de la sección 42,  sección 8va e integrantes del jardín del abuelo; mismos equipos que se mantienen activos todo el año, con ensayos, juegos de fogueo y  representaciones municipales, estatales y nacionales.
La práctica constante de cualquier actividad física, es escalar el primer peldaño hacia una mejor calidad de vida; psicológica y medicamente, está fundamentado que  ejercitarse regularmente produce químicos de la felicidad, mejora la autoestima, las relaciones sociales, previene el deterioro cognitivo, entre muchos otros beneficios.
 El cachibol, posee muchos atributos positivos: hay un constante movimiento corporal, flexión de rodillas, saltos, ubicación en el espacio, control corporal, lateralidad, coordinación motora, equilibrio, fuerza, velocidad, y sobre todo, es un antídoto natural contra la depresión,  stress,  tristeza y soledad.  
Vaya mi reconocimiento para todas esas bonitas personas que he conocido a través de la práctica de este deporte; aplaudo la tenacidad, entrega y compromiso con nuestra salud corporal y emocional; abrazo los bellos momentos compartidos, las sonrisas a flor de piel, la broma, la palmada de aliento, la semilla de amistad sembrada y depositada en tierra fértil; aplaudo la tolerancia, respeto, empatía y solidaridad entre todos los integrantes; felicito  a los entrenadores, especialmente a los nuestros, “Franso y Liz” una joven pareja que vive intensamente la pasión del cachibol y la trasmiten con la fuerza y entusiasmo de su juventud; doy gracias a la vida que me ha dado tanto; espero con ansia cada entrenamiento; vuelvo a casa cansada, pero plena, feliz, satisfecha.  








Los colores de la naturaleza

 Acróstico:
     Los colores de la naturaleza
Los colores le dan tinta a  nuestra vida,
Ornamento,  visión  y sabor  a los  sentidos,
Son   percepciones sensoriales   del espectro.

Conllevan emociones, sentimientos y  afectos.
Ordenados  en el prisma  del firmamento.
Lavanda, lino, ladrillo, iluminan  el trayecto;
Oro, ocre,  camino al   sueño  de un tesoro,
Rojo como la sangre, anhelado como el rubí,
Esmeralda,  como  la  esperanza
Salmón,  como el  rosado del corazón.,

Dorados   son los caminos del sol, dan  abundancia y poder,
Escarlata, como el  carmesí, rojo vivo   de ensueño y  deber.

Lino, color blanquecino,  que se encuentra en la semilla y en el vino
Ámbar, piedra cálida de luz radiante que ilumina al instante.

Negro, es la ausencia del color y está  vinculado  al dolor,
Amarillo es el color de los lirios,  orquídeas y tulipanes;
Tornasol,  es el  cambio de color al igual que el camaleón.
Uva,  mezcla  el rojo, azul y negro, y va formando engranes.
Rosa, nombre femenino, flor regalada  por el género masculino.
Azul, como la nostalgia, la inmensidad,  la pureza y castidad,
Lavanda y limón, su aroma eleva los sentidos, acelera los latidos,
Esmeralda,  color de la naturaleza,   de la salud, bienestar y belleza,
Zafiro, piedra con tonalidades,  mágico color que no pierde sus bondades, 
Añil, relaciona conocimiento y  percepción, al igual que  la intuición.

Profa. Cuquita Sandoval Olivas

Cuquissandoval08@gmail.com

Longevidad y calidad de vida

Longevidad y calidad de vida
Por Maestra Cuquita Sandoval Olivas
cuquissandoval08@gmail.com
Etimológicamente longevidad es una palabra de origen latino, “longus” de largo, “aevum”,  referencia al tiempo. Es la extensión cronológica del tiempo de vida. Por calidad entendemos,  cómo vive el ser humano cubriendo sus necesidades primordiales: biológicas, sociológicas, económicas, emocionales y psicológicas.
El psicólogo estadounidense  Maslow,1 sustenta que hay una pirámide de las necesidades humanas que debemos cubrir, quedando como base las  fisiológicas, seguidas por las de seguridad,  afiliación,  reconocimiento y en la cúspide la autorrealización.
La expectativa de vida que hoy en día tiene el ser humano presenta grandes variaciones. Entre los lugares más longevos se encuentra la isla japonesa de Okinawa,2 que según registros estadísticos es de hasta 127 años.
Entre los factores causales que han encontrado  genetistas e investigadores destacan:  estilo de vida y  alimentación sana, ejercitación constante, vida en comunidad y apoyo familiar, así como el equilibrio mental, práctica de meditación y crecimiento espiritual reforzado por la fe y espiritualidad; los ancianos utilizan una vestimenta roja, que es distintivo de respeto y admiración de la comunidad hacia su persona por la experiencia alcanzada
El Valle de Unza, es un lugar paradisiaco ubicado en el Noroeste de Pakistán, que presenta registros de vida de hasta 129 años, su vida prolongada y saludable se atribuye a las dietas ricas en vegetales y frutos, la calidad del agua y del aire y según cita el zoólogo y expedicionario marroquí, Jordi Macgraner,3 quien vivió, observó y estudió el comportamiento de la comunidad por nueve años; concluye su investigación diciendo:
... “los elementos fundamentales que nos deberían definir como seres humanos son: la camaradería, el amor por la diversión, la música, el baile y la cultura; proteger a los pobres, al medio ambiente; alejarse de las tensiones, ser felices y vivir el amor en general”.
La esperanza de vida tiene una relación directa con un mejor desarrollo económico y social de la población. Hablando  de México, ésta ha aumentado con el transcurso del tiempo, en 1930 era apenas de 34 años, en la actualidad es de 76.
A pesar de ese aumento considerable en expectativa de vida, el periódico la Jornada (2017)4, publica resultados de investigación al comparar a México con los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en materia de salud, enfatizando que México tiene un promedio de 6 años menos que el resto de la agrupación, y que al no aumentar el porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) para enfatizar este rubro, la probabilidad de muerte de los mexicanos en el primer mes posterior a un infarto se cuadriplica.
Triangulando información al respecto, en el 2016, el  “Diario de Chihuahua”5 publica información recabada en el registro civil en cuanto a las principales causas de mortandad en el estado de Chihuahua, encabezando la lista, el sistema cardiovascular, seguidamente  la diabetes mellitus y las cerebro vasculares.
De acuerdo a los datos de la encuesta intercensal del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI 2015),6 en Chihuahua se registra un aumento de población de adultos mayores, estando en el 2010 de 6.2 y registrándose en el 2015 un 7.2
Estos datos sirven para referenciar y tener un comparativo con nuestro país y su gente adulta. Invita a  incursionar en una reflexión profunda e introspectiva  hacia el futuro promisorio que aspiramos de vivir más y mejor, agregando cantidad y calidad a nuestra existencia, así como el de abrir nuestro entendimiento, alma y corazón para ser más sensibles, respetuosos y comprensivos con las personas de la tercera edad.

1https://es.wikipedia.org/wiki/Abraham_Maslow
2https://www.libertaddigital.com/ciencia-tecnologia/salud/2015-04-22/aprendamos-de-okinawa-la-poblacion-mas-longeva-del-mundo-1276546070/
3https://www.kienyke.com/historias/hunza-el-pueblo-que-tiene-el-secreto-de-la-larga-y-sana-vida
5http://eldiariodechihuahua.mx/Local/2016/10/30/de-que-se-mueren-los-chihuahuenses/
6http://eldiariodechihuahua.mx/Estado/2016/08/19/crece-poblacion-de-adultos-mayores/


viernes, 22 de marzo de 2019

Vientos de esperanza
Profra. Cuquita Sandoval Olivas

Una comunidad se conforma por personas que cohabitan un espacio determinado compartiendo normas, costumbres, idioma, valores y otros elementos comunes que permiten la interacción y convivencia.
Algo que nos identifica dentro de la universalidad, es precisamente el origen y el fin de la vida.  Debido a la alta incidencia de suicidios que se han presentado últimamente, me permito trastocar este delicado tema.
Chihuahua, el estado grande, primer lugar en estadísticas de personas que decidieron poner fin a su existencia; nuestra comunidad, ha enfrentado la recurrencia de esta problemática social, que deja a su paso una estela de dolor, vulnerabilidad, lágrimas, tristeza, luto y duelo tanto a la familia y al contexto en que se desarrolla, como las vidas y sueños truncos de quien lo perpetua.
Vivimos en una sociedad inmersa en la comunicación e información. Los grandes avances en la tecnología, nos permiten estar informados al instante de los que acontece en nuestro entorno inmediato y lejano. Los medios masivos de comunicación muestran en sus titulares: “Suicidio de niño, de jovencita, señor, señora”, sin respetar rangos de edad o posición social.
Enmedio del asombro, sorpresa, dolor y alarma que generan estas noticias dentro de la comunidad; las autoridades municipales, educativas y sociedad en general, buscan establecer acciones concretas que coadyuven a identificar y prevenir tan lamentables sucesos para poder revertir esa estadística que va en aumento en forma alarmante.
El DIF municipal se dio a la tarea de ofrecer un taller gratuito denominado “Prevención al suicidio”, invitando a toda la comunidad para aprender a detectar signos o síntomas que ayuden a identificar a personas que están pasando por estrés traumático, depresión, malos tratos, a escuchar esos gritos de ayuda silenciosa, que quedan ahogados en el eco de la desesperanza.
La Tanatóloga, oriunda de nuestra localidad, Lic. Sofía Muela, invitó al taller “Intervención al suicidio” y “Suicidio, siglo XXI”.
Los integrantes del Consejo Municipal de Educación y el Cabildo de Mujeres se suman a estos esfuerzos, buscando el acercamiento en los contextos educativos, con los padres de familia y con la comunidad en general.
En concordancia con los distintos niveles educativos, se empezaron a gestionar conferencias, pláticas y talleres que permitan abrir puertas a la detección y prevención, así como ventanas cuyos marcos traigan    soplos y vientos de esperanza, a quienes se encuentren atrapados en la desolación.
Desde hace unos años, los nuevos currículos de educación trajeron a relucir un nuevo concepto: “Resiliencia”, que de acuerdo al significado del diccionario de la Real Academia Española (RAE), la define como la capacidad que tiene una persona para superar circunstancias traumáticas y adversas. 
Este término tiene su origen en el latín, “resilio” que significa volver atrás, volver de un salto, resaltar, rebotar. De igual manera, se utiliza en física para expresar la cualidad de los materiales a resistir la presión y su capacidad de resistencia al choque.
Todas las personas debemos ser gestores y promotores de la resiliencia, ya que, como seres humanos, en algún momento de nuestra existencia, requerimos superar rupturas, duelos, traumas, abusos, pérdidas, abandonos, enfermedad y episodios difíciles; por lo que necesitamos desarrollar ese resorte moral que permita la reconstrucción y sanación interna, levantar la frente y mirar hacia adelante para encender y portar la antorcha que ilumina el futuro.

Debemos convertirnos en diseñadores de factores protectores que puedan sobreponer a la adversidad; dar más amor, empatía, tiempo y escucha activa a las personas con las que tenemos la fortuna de cohabitar en un espacio determinado.