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viernes, 25 de junio de 2021

Día de San Juan


El día 24 de junio trae muchos recuerdos a mi mente, primeramente porque ese día celebramos el día de santo de mi querido hermano Juan Eugenio Carrillo Olivas (Pollito) y porque ese día era esperado con ansia, desde muy temprano estábamos juntando agua para salir a la calle a bañarnos. Además de ir a San Juan a tomar tesgüino. 

La palabra «hermano» me remite al significado que mi corazón le atribuye, esa figura que siempre está ahí para escuchar, aconsejar, te presta el hombro para llorar, ríe y se goza de tus triunfos: Un vínculo tan fuerte, que se tejió desde el vientre de mamá, al compartir esos lazos de sangre que son indisolubles, que, aunque pase el tiempo, sigue estando ahí, cual cadenas adheridas por recuerdos, vivencias y momentos compartidos.  

Dedico estas palabras a mi querido hermano, Juan Eugenio Carrillo Olivas, mejor conocido como Pollito» apodo con el que fue bautizado por nuestra madre, porque decía que de pequeño lo colocaba en un chiquigüite con maíz, y él, empezaba a esparcirlo por el piso.

Ocupa el cuarto lugar en la familia, yo el quinto, por lo que siempre lo miré como una figura de autoridad, con respeto, pero, sobre todo, con mucho amor.

Crecimos, formamos nuestra propia familia, siempre rodeados e iluminados por esa flama de amor que mamá encendió en pensamiento, mano y corazón.

Él se encargó de construir mi primer hogar, cada cimiento y pared levantada tiene impreso el sudor de su frente, el amor con que sus manos fueron edificando esa casa que albergó mis sueños e ilusiones y el nacimiento y niñez de mis hijos.

Gran parte de las construcciones y remodelaciones de Balleza y sus alrededores llevan impreso su sello de albañil.

Y cuando los años fueron pesando sobre la espalda de mamá, ahí estaban Pollito y Raúl, como dos estructuras que cuidaban de ella día y noche para que nada le faltara.

Cada persona es única y especial, tenemos comportamientos, actitudes y características que van definiendo nuestra personalidad. Mi hermano “Pollito”, siempre ha sido una figura que simboliza el trabajo, gusta también de hacer bromas, chascarrillos y tiene una memoria privilegiada para contar anécdotas e historias del pueblo; la humildad que lo caracteriza le ha hecho ser acreedor al cariño de la comunidad y de todas las personas que le conocen.

Es un poeta, desde que estaba el grupo musical “Los Reyes de Balleza”, el escribió unas canciones que ellos se encargaron de musicalizar y grabar. “Balleza y su fama” y “El corrido de Tello”.  Últimamente, ha publicado algunos de sus poemas en su mural de Facebook.  

Presento uno de sus poemas:

El trono de mi árbol

 

Cuando las hojas caen

Es que el otoño llegó

Vendrán tardes grises

Habrá noches frías

El viento tumba las hojas

Y el tiempo mis alegrías

 

Que noches tan negras

sin el cielo azul

mi pelo con canas

mi cuerpo sin ganas

ya no hay juventud

En cambio, aquel árbol

Plantado en el huerto

Se duerme en invierno

Y en la primavera

Despierta contento

 

Con hoja y retoño

se mece feliz

radiante frescura

de tallo a raíz

 

Aquel tronco seco

Que vi por ahí

También tuvo vida

También fue frondoso

Y hoy vemos su fin

 

Mis brazos cansados

Cual hoja madura

Flaquean en su sostén

 

Maduras no duran

Se van a caer

El tronco de mi árbol

Se seca también

 


 


 


Reseña del libro "La rebelión de las ratas. Fernando Soto Aparicio.

https://www.elsoldeparral.com.mx/analisis/espejos-de-vida-la-rebelion-de-las-ratas-6884653.html


La rebelión de las ratas

Fernando Soto Aparicio (1933-2016), escritor boyacense, con 74 libros impresos, quien trabajó por más de 30 años en televisión y escribió más de 5000 libretos, además de cientos de artículos sobre periodismo especulativo. Poseía un archivo mental infinito sobre historias y personajes que fueron rescatados en sus protagonistas; se reconoció como lector, antes de ser escritor, argumentando que la fuerza de sus obras residía principalmente en su dedicación, entrega y disciplina, así como la investigación sistemática de los temas abordados en sus distintos géneros literarios.

Una de sus múltiples cualidades es que era autodidacta, solo cursó hasta quinto grado de primaria, pero desde pequeño se formó el hábito de la lectura, aprendió francés para leer la publicación original de Victor Hugo “Los miserables”, haciendo constar que es uno de sus textos favoritos.

Este texto hace referencia al libro “La rebelión de las ratas”, novela escrita en 1962, y con la cual se consagra como uno de los mejores escritores colombianos; cuenta en sus memorias que, para escribirlo, debió emplearse como minero por dos semanas, para conocer de viva voz y en carne propia el sentir de los obreros y las condiciones de trabajo imperante en las entrañas de la tierra, a sabiendas que estas han cambiado con el tiempo, debido precisamente a la insurrección surgida por la explotación de la industria extranjera, cuando se carecía de la figura del sindicato y los distintos mandos de poder, se encargaban de exprimir la fuerza de sus mineros, sometiéndolos a largas jornadas de trabajo en condiciones infrahumanas, por un mísero salario que apenas les permitía sobrevivir junto con sus familias, obligados por el hambre a delinquir, prostituirse y sentir pisoteada su dignidad humana.  Muestra la diferencia abismal de calidad de vida en las distintas clases sociales, desde vivir en un basurero a las grandes mansiones ocupadas por los explotadores.

Cada página es una crítica social, que retrata la miseria: “días sin pan, sin calor, ni esperanza”, donde hasta el mismo polvo se burlaba de la angustia y ansiedad de los oprimidos. Describe magistralmente a cada uno de los personajes, desde el infante, el púbero, la adolescente que está despertando a las pasiones carnales, la mujer sumisa, abnegada, que sufre en silencio y otra imagen femenina que representa la tentación aún en medio del hambre y la opresión de su humanidad.

Las figuras de autoridad se visualizan con un poder que se vende al más fuerte, pisoteando al débil. Hasta que el oprimido llega a la cúspide de soportar la injusticia, y las emociones del dolor y cólera, se pone de manifiesto, donde la unión del infortunio es más fuerte que el miedo y llega el momento que sin temor a la muerte se enfrentan a los opresores.

Esta novela pone de manifiesto algunas de las debilidades humanas, como dejar en el bar o apostar a las peleas de gallos, el dinero que su familia necesitaba para subsistir, así como los pensamientos de infidelidad y deseo carnal. Su escritura gira en torno a conflictos e injusticia social y la lectura de sus obras es un referente obligado en la educación básica de Colombia.

Invito a incursionar en esta magnífica obra, relatada con un lenguaje sencillo, descriptivo y metafórico; permite reconocer aspectos históricos vividos en otro país, pero que tienen referente con otros países y ciudades mineras, así como la importancia de la conformación de los sindicatos para proteger al asalariado.

 





lunes, 21 de junio de 2021

Cerrando el ciclo escolar

https://www.elsoldeparral.com.mx/analisis/espejos-de-vida-cerrando-el-ciclo-escolar-6856668.html
                                     Cerrando el ciclo escolar 
 A partir de la entrada de la pandemia a México en marzo del 2021 se cerraron las distintas instituciones educativas. Externamente, pudiese verse como un descanso para los principales agentes involucrados en el proceso, «alumnos, personal y padres de familia», sin embargo, la tarea ha tomado distintas dimensiones, con nuevos retos y aprendizajes. Este es el segundo ciclo escolar que se concluye en la modalidad virtual.

 

Se ha hecho uso de variados recursos digitales para interactuar y dar continuidad a los planes y programas de estudio, buscando, ante todo, que el tiempo dedicado a la formación no detenga su marcha y prepare a los estudiantes para el siguiente grado o nivel educativo. Los seres humanos vamos formando hábitos por la repetición de conductas e instituyendo costumbres con base a las actividades que son aceptadas y difundidas por la comunidad y son realizadas dentro de la periodicidad de un tiempo; tal es el caso, de los eventos que han seguido su curso adaptándose a los nuevos requerimientos, como el concurso estatal Don Quijote nos invita a leer, las evaluaciones trimestrales, las reuniones de Consejo Técnico Escolar y el cierre del ciclo entre otras más.

 

El festejo y ceremonias forman parte de la cultura de nuestro pueblo, aunque hayan adquirido un nuevo tinte, debido a la pandemia y a las restricciones, se han seguido efectuando con los acomodos necesarios; los chicos posan con su toga para la fotografía del recuerdo, se hacen caravanas con globos y letreros anunciando que un ciclo escolar se ha concluido o simplemente se anuncia en las redes sociales tras un sencillo homenaje en casa. La escuela pasa al archivo las carpetas con esos nombres de personas que dieron vida, calor y relevancia al centro durante su estancia; hoy no hay paredes ni ecos que guarden su recuerdo; las vivencias que se construyen en el día a día quedaron en memorias; hay quienes aún no conocen personalmente a sus maestros ni a sus compañeros de clase.

 

Por este conducto, deseo externar mis felicitaciones a todos y cada uno de los niños jóvenes y adultos que están en este proceso de transición; a sus maestros, a las distintas dirigencias y autoridades educativas y a los padres de familia por el compromiso de apoyar desde el hogar en su formación. Concluyo con la siguiente cita reflexiva, “la educación virtual, no es algo que concluirá con la pandemia, ni tampoco algo que se efectuará en el mañana, es una realidad, está aquí para quedarse”.

sábado, 12 de junio de 2021

Trabajo final de Héctor Valverde

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La mujer a través de la historia

https://www.elsoldeparral.com.mx/analisis/mujer-la-mujer-a-traves-de-la-historia-6828313.html

La mujer a través de la historia

Hoy voy a contarles un cuento especial, dijo la abuela a sus nietas. − Quiero que se sienten a mi alrededor y pongan mucha atención.

En el inicio de todos los tiempos, cuando Dios estaba construyendo el mundo, hizo al hombre para que lo habitara, pero al verlo tan solo, le quitó una costilla y creó a la mujer. Un ser tan perfecto, no solamente en lo físico sino en lo emocional; tal creación, despertó la ira del demonio y fue fraguando la manera de pervertirla y restarle hermosura.  

Primeramente, la tentó, invitándole a probar la tesitura, aroma y sabor de una manzana del árbol prohibido; después, fue expulsada del paraíso y condenada a parir a sus hijos con el dolor y desgarramiento de sus entrañas; luego, ocultó su figura de la faz de la tierra, su silueta quedó desdibujada, como si solamente el varón existiera y fuera el único ser que podía estudiar, aprender, crecer y aportar a la humanidad.

No se le permitía que tuviese control sobre su cuerpo, su salud reproductiva, la selección de su pareja; no podía ocupar cargos públicos representativos; estaba confinada a los espacios privados, con todas las carencias de toma de decisiones; no podía elegir a sus gobernantes, ni educarse;   pero, a pesar de todos los obstáculos puestos, la mujer lograba sobreponerse e iba sorteando uno a uno los impedimentos; emergiendo del silencio, del grito ahogado, de los atropellos que en su nombre se cometían.

Entonces, este ser malévolo, instituyó otras formas de hacerla sufrir. Sembró en el corazón de algunos hombres débiles de voluntad, trastornos de conductas; y es así como la mujer empezó a ser castrada, violada, prostituida, mancillando su cuerpo, pero dejando limpios sus pensamientos y emociones.

Una vez más, el diablo le dijo: Las adicciones quebrantarán tu voluntad, tu espíritu quedará flagelado y serás como un alma en pena vagando por el mundo.

Volvió a quedar defraudado, el amor se sobrepuso.  De tal forma que procedió a insertar la violencia, la forma más cruel de maltrato verbal, emocional, físico y social. De esta última calamidad impuesta, le ha costado más levantarse; pero afortunadamente, cada día hay más dependencias que ofrecen apoyo y ayuda; más conciencia individual, más resiliencia y fomento a la autoestima para reconocerse y amarse a sí misma.

Siguen brotando rosas de los confines de la tierra; no más ablación en los países islámicos, no más mujeres maltratadas, no más feminicidios.

 ¡Alcemos la voz con acciones que alcancen a visualizarse y escucharse por todo el mundo! − ¡finalizó emocionada la abuela!

Su mensaje, cargado de emotividad, cimbró el corazón de sus hermosas nietas, quienes siempre se habían visualizado como princesas y reinas, que estaban a la espera del príncipe que llegara a llevarlas hasta el castillo construido para ellas.


Una rosa sin espinas

viernes, 11 de junio de 2021

El arte de escribir

https://www.elsoldeparral.com.mx/analisis/espejos-de-vida-el-arte-de-escribir-6828290.html

El arte de escribir

Arte significa creación, ordenamiento de la razón; imprimir el sello personal a lo que se piensa; el estilo adoptado por el creador aporta precisión, claridad y armonía.

Escribir, es hilvanar palabras; unir las sílabas con cohesión y coherencia, generalmente surge la idea como una luz en el pensamiento, se conceptualiza y en la medida que se van formando frases y párrafos, la palabra se convierte en vehículo del pensamiento, que trasmite un mensaje y que espera al receptor para entablar un diálogo.

El incursionar como creador de escritura implica conocer la gramática, «que es la ciencia que estudia las combinaciones y componentes de una lengua» y la sintaxis «que es el arte de combinar las palabras correctamente». De esa forma, se incursiona en varios campos y contextos donde se quiere emitir un mensaje. Tanto la lectura como la escritura, son competencias que están en constante reconstrucción y desarrollo, forman parte medular de nuestro entorno personal y social. Requerimos leer el mundo en que vivimos y externar nuestro pensar y sentir. Citando al pensador brasileño Paulo Freire (1974) quien dice: leer-escribir es un proceso dialéctico que sintetiza la relación existente entre conocimiento-transformación de nosotros mismos”.

Por lo tanto, cuando leemos lo que sucede a nuestro alrededor y lo comparamos con lo que pasa en otras esferas, vamos interiorizando una conciencia, podemos emitir una opinión fundamentada y cuando lo trasladamos a la escritura, nos permite una transformación interna de nuestros propios pensamientos.

El arte de escribir no es innato, es una habilidad que se desarrolla procesualmente; le antecede la lectura como preámbulo y puerta introductoria al mundo del conocimiento; no solo se aprende de los textos ni de la educación formal, sino de la observación de hechos cotidianos, de la interiorización y reflexión de las cosas que suceden y pasan por el escrutinio de la conciencia y luego de la confrontación con lo que dicen otras lecturas provenientes de diversos autores

Escribir, es un verbo que trae consigo un equipaje de deberes, pero también de satisfacciones; requiere tiempo, esfuerzo, paciencia, dedicación, perseverancia, voluntad de dar existencia al mensaje y el anhelo latente de compartir con posibles lectores, quienes, a su vez, tienen la posibilidad de asentir o disentir con lo expuesto, pero que, de alguna manera, se convierte en fuente de conversación entre escritor y lector.

La invitación implícita en este artículo, es que sigamos cultivando estas competencias de la lectura y la escritura, que escuchemos al anciano, que rescatemos las historias que seguidamente pasarán al rincón de los olvidos; hay tanta sapiencia y experiencia en cada uno de ellos; observemos lo que gira a nuestro alrededor, emitamos nuestra opinión cada vez más fundamentada, reconociendo que la verdad, es relativa, «todo depende del cristal con que mira».

Volvamos a retomar la pluma y el papel, o en su defecto, las redes sociales; emitamos nuestros pensamientos y sentimientos por medio de la carta, el mensaje escrito, el diario personal, entre otros muchos recursos; sin olvidar, que siempre debe prevalecer el respeto, tolerancia, empatía y solidaridad hacia los otros. 

 


viernes, 4 de junio de 2021

Hablemos de política

https://www.elsoldeparral.com.mx/analisis/espejos-de-vida-hablemos-de-politica-6798139.html

Una de las acepciones etimológicas de la palabra política proviene de ciudad, por lo que se explica como el “arte propio de los ciudadanos” y el “arte de vivir en sociedad”. Aristóteles definió al hombre como un animal político, porque es capaz de crear y organizar la vida de las ciudades y el actuar de las sociedades.

Platón, escribe en el año 370 a.C. 10 libros sobre la República, explicita en cada uno de estos, cómo sería el estado justo, ideal y ético, así como las características de sus gobernantes; en sus disertaciones hace uso de alegorías y mitos, como el de los metales, donde las clases sociales quedan de manifiesto: oro para los gobernantes, plata para los guardianes y bronce para quienes producen los bienes: artesanos, comerciantes y jornaleros «resto de la población». Desde ese entonces la palabra «democracia» está en boga, incluso en el libro IX, se dice que el hombre tirano surge del hombre democrático.

El siguiente personaje seleccionado para ahondar sobre el tema es Maquiavelo, nacido en Florencia en el año de 1469, durante su infancia y juventud fue testigo presencial de cómo se aplicaba el poder y las consecuencias derivadas, posteriormente ocupó un cargo de gobierno en política exterior y asuntos militares; la educación recibida y experiencias personales en el mundo político, contribuyeron a la formación de su pensamiento. Es hasta después de su muerte que se publica su libro “El príncipe” (1532), «prohibido por la iglesia y que sale a la luz con el movimiento de la Ilustración».

Este preámbulo introductorio lleva la intención de hacer un saltó en la memoria selectiva para llegar a la reflexión del momento actual.

Las sociedades se han conformado con base a luchas sangrientas impulsadas por la pasión y los ideales; las conquistas de los derechos y la estipulación del ser y hacer ha quedado de manifiesto en la Constitución Mexicana. La historia se encarga de mostrarnos los hechos objetivos que han predominado para llegar y sostenerse en el poder, basta recordar a Don Porfirio Díaz y sus 33 años como presidente.

Indudablemente, la ambivalencia de la vida siempre presenta ambas caras de la moneda: lo bueno y lo malo. El surgimiento del primer partido que nace en 1929, saliendo triunfante en las elecciones por 71 años consecutivos, hasta la entrada del nuevo siglo y milenio que pierde ante un partido de alternancia.

En ese devenir histórico, los mexicanos hemos visto desfilar una serie de gobernantes de índole nacional, estatal y municipal, centrando las esperanzas en la toma de decisiones que aludan a esos valores instituidos desde la visión filosófica platónica: prudencia, valor, templanza y justicia y los cuales hemos visto crecer en letra más no en acciones contundentes en pro de una mejor sociedad. 

Este escrito conlleva la intención de que quien lo lea, pueda hacer una introspección sobre los procesos políticos actuales; que, a la hora de emitir el voto, sea hecho con la convicción y certeza de estar eligiendo no a un partido, sino a la persona que mejor pueda representar los intereses colectivos; no fragmentar familias y amistades por tener una opinión distinta; no caer en el juego de creer todo lo que escucha y ser trasmisores de desprestigio.

Me despido trayendo a colación una frase de Maquiavelo: “Hay que ser cauto en el creer y en el obrar y proceder con moderación, prudencia y humanidad, de modo que la excesiva confianza no lo haga a uno incauto y la excesiva desconfianza no lo haga insoportable”.